Se me ha hecho cotidiano oír de amigos y familiares que regresan a la ciudad; "Esto sigue tal cual", uno mismo de repente se aburre de ver siempre los mismos colores, las mismas casas, el puente y que se yo, una infinidad de cosas que caracterizan a Puerto Aysén.
Hoy por la tarde, salimos con mi papá a dar vueltas por la ciudad y de repente el viejo se puso a monologar sobre el centro y lugares aledaños al centro, aquí nació Fontecha me decía, esto antes era así y aquí había tal cosa, cuando pasamos por el sector Balsa, me comentaba sobre la cárcel que hubo ahí, la plaza es tan diferente me decía, y la Iglesia ¡Mira la huea que tenemos de catedral!.- dijo exaltado, y yo reía, el hombre tiene casi setenta años y una historia envidiable, conoce casi toda la región y ciertamente que conoce Aysén y reconoce los cambios...
Hoy por la tarde, salimos con mi papá a dar vueltas por la ciudad y de repente el viejo se puso a monologar sobre el centro y lugares aledaños al centro, aquí nació Fontecha me decía, esto antes era así y aquí había tal cosa, cuando pasamos por el sector Balsa, me comentaba sobre la cárcel que hubo ahí, la plaza es tan diferente me decía, y la Iglesia ¡Mira la huea que tenemos de catedral!.- dijo exaltado, y yo reía, el hombre tiene casi setenta años y una historia envidiable, conoce casi toda la región y ciertamente que conoce Aysén y reconoce los cambios...
Sargento Aldea, centro de AysénSeptiembre 2008
Mi historia comienza en el cerro mirador comiendo galletas y mi mamá tomando fotos, recuerdo mi primer día en el colegio Sagrada Familia, el Kinder y la tía Jimena, los juegos en la plaza y las caídas en bicicleta...
Mi papá recuerda sus pichangas a pata pela' en el pastizal donde hoy hay un inmenso supermercado, recuerda que don Smith llegaba de repente a los mates y les comentaba como iba el asunto del Puente Presidente Ibañez, el Liceo de Hombres y los recuerdos de esos años, del coro y su eterna caminata por la región enviado por el servicio de Correos y telégrafos donde trabajó y jubilo hace un tiempo, de la máquina de escribir que se arreglaba a palmetazos y los camiones que a puros alambres hacían salir de panas, de los caballos que fletaban por Sargento Aldea, de las inundaciones, en fin, tantas cosas que no viví y que mi padre recuerda con tanta nostalgia que hoy pienso a veces, que el Aysén de antes era mucho mejor que el de hoy y ahí grita el caballero; ¡pero claro pues hombre! antiguamente todos eramos amigos y nos juntábamos en los malones y para ir al matiné, ¿Que es eso? pregunté, el Cine contestó...
Mi papá recuerda sus pichangas a pata pela' en el pastizal donde hoy hay un inmenso supermercado, recuerda que don Smith llegaba de repente a los mates y les comentaba como iba el asunto del Puente Presidente Ibañez, el Liceo de Hombres y los recuerdos de esos años, del coro y su eterna caminata por la región enviado por el servicio de Correos y telégrafos donde trabajó y jubilo hace un tiempo, de la máquina de escribir que se arreglaba a palmetazos y los camiones que a puros alambres hacían salir de panas, de los caballos que fletaban por Sargento Aldea, de las inundaciones, en fin, tantas cosas que no viví y que mi padre recuerda con tanta nostalgia que hoy pienso a veces, que el Aysén de antes era mucho mejor que el de hoy y ahí grita el caballero; ¡pero claro pues hombre! antiguamente todos eramos amigos y nos juntábamos en los malones y para ir al matiné, ¿Que es eso? pregunté, el Cine contestó...
Sargento Aldea 1960Esta noche me salí un poco del libreto, había tratado de impersonalizar los relatos en este blog, pero se hizo inevitable contar esto, soy de Aysén y realmente me encanta sentirme parte de una historia tan rica como la de este maravilloso lugar...
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